Sostiene mi colega Poncio ( sí, los chistes sobre lo limpias que tiene las manos, se los sabe todos…) que realmente pasas a la categoría de amigo cuando en una lista de Whatsapp figuras sólo con tu nombre a secas. Andrés, simplemente, y no Andrés fontanero o Andrés contabilidad.
Él lo tiene más fácil, porque Poncios hay pocos, pero Cármenes, somos legión, y además si tienes la fatalidad de ser pareja de uno de la tuna, figurarás en muchas agendas con el mote de tu churri al lado.
Desde luego, así no hay forma de pasar a la historia …Salvo que ,de repente .me venga arriba y decida unir mi nombre a un color, eso sí que es glamour.!!..Rosa Schiaparelli, Rojo Valentino, o el color al que dedico esta entrada: el azul Klein.
El azul eléctrico, el azulón, menudo color más rotundo!
El azul, blanco y negro es insuperable…
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La falda es de HM, las botas de Geox, el jersey es un básico de cashmere , collares de Tous y bolso de Loewe. (¿ He dicho ya lo mucho que me gustan los bolsos blancos en invierno?) .
¿Y con un gris…?
El pantalón es de Karen Millen, los pendientes una creación mía. Y la misma chaqueta de borreguito.
Con un pantalón blanco, se puede añadir cualquier color, salvo amarillo ( bueno , si nos contratan en Ikea...)
Yves Klein (1928-1962) siempre me ha parecido un tanto inquietante: un tipo que , en un alarde de soberbia ,decide que es el inventor del azul ultramar de toda la vida. Total , desde el Big Bang para acá casi no hay cosas de ese color en este planeta…
Las flores son de Verdenace Guadalajara.
Tengo yo mis dudas sobre si una mujer hubiera sido capaz de semejante osadía. Seguramente, no….a lo largo de la historia la ambición femenina siempre ha tenido mala prensa. Ya sabemos, un hombre ambicioso es el que tiene empuje, una mujer ambiciosa no es más que una arribista.
¿ Y por qué nos cuesta tanto postularnos, venirnos arriba, presumir?
Hagan la prueba, señoras: su amiga Purita estrena unos pendientes espectaculares y ustedes los alaban justamente. Purita se deshará en explicaciones, que si es una baratija del joyero de su tía, que si un saldo , que si los encontró en un mercadillo en la sierra…. La respuesta correcta sería: “sí, muchas gracias, son preciosos y me sientan de maravilla.”
La modestia ( incluso siendo verdadera) no solo no es elegante, además es una pérdida de tiempo.
Feliz semana!
** Ponte bien, hermanita, no soportaría un mundo sin ti.
Sorprendida estoy!!! Que alegría haberte conocido, y sobre todo reconocerte en este blog!!!
Pero si eres tú!!! Me he dicho a mi misma cuando he visto tu foto. El próximo día, cuando vengas a mi tienda, ¡espero que vuelvas!, nos tomamos un café y hablamos de este sorpresón!!!
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